El Zoológico de Córdoba cumple en mayo 50 años y por tal motivo el Ayuntamiento está preparando un programa de actos para festejar el aniversario de una instalación que fue modélica en su momento y que con el paso del tiempo ha logrado adaptarse a las distintas normativas vigentes a la vez que en todo este tiempo presta un importante servicio en la cría de especies en cautividad. Actualmente, el Zoológico forma parte de un complejo de ocio y formación dedicado a lo niños, junto con el Jardín Botánico y la Ciudad de los Niños. Cada fin de semana se convierte en un punto de atracción para las familias, tanto de la capital como de la provincia que aprovechan uno de los atractivos de la ciudad.
La inauguración tuvo lugar el 16 de marzo de 1968, con motivo de la celebración en Córdoba del I Congreso Ibérico de Zoológicos, que fue organizado por el Ayuntamiento de Córdoba y al que asistieron representantes de Madrid, Barcelona, Valencia, Albacete, Tarragona, Cuenca, Jerez de la Frontera, Huelva, Málaga o Toledo, entre otras ciudades. Este congreso se desarrolló en el Alcázar de los Reyes Cristianos y desde allí se trasladaron los asistentes, encabezados por el alcalde, Antonio Guzmán Reina, hasta el Parque Cruz Conde, donde se ubicó el recinto en una de las laderas de la colina de los Quemados.
El Zoológico abrió sus puertas con el nombre de Juan Barahona, y su viuda, Emilia Costi, fue la encargada de cortar la cinta inaugural, ya que la base de la colección de animales fue una donación suya, que tenía en su casa de San Basilio. El párroco de San Basilio, Guillermo Romero, fue el encargado de bendecir las instalaciones antes de realizar los presentes un recorrido por el recinto para conocer unas instalaciones que se sumaban a los atractivos de Córdoba.
El número de especies que contaba el Zoológico de Córdoba cuando se inauguró no era, ni mucho menos, el que fue luego adquiriendo con el paso del tiempo. El dromedario, con su casita de inspiración árabe, las grandes jaulas para los monos, el oso, el elefante y las aves clasificadas en unos espacios cuadrangulares y consecutivos. Una nota característica del Zoológico de aquellos años era que muchas de las especies de gran porte sólo contaban con un ejemplar, por lo que había que hablar siempre de ellas en singular.
Dentro del marco del Congreso Ibérico de Zoológicos y de la inauguración del recinto cordobés, se completó el programa de actos con una exposición de pinturas en la Sala Municipal de Arte de la calle Góngora de lienzos de tema cinegético de Luis Aldehuela, así como una exposición filatélica en torno a la fauna que se pudo visitar en el Círculo de la Amistad.
