Aunque nació en Zaragoza, Isabel Albás vive en Córdoba desde hace diez años, una ciudad en la que nacieron sus tres hijos y su marido. Actualmente es parlamentaria andaluza por Ciudadanos, aunque ha sido autónoma con un comercio, lo que le ha dado una experiencia que ahora traslada a la actividad política. Coincide con muchas mujeres en que «la desigualdad entre hombres y mujeres en pleno siglo XXI desafortunadamente es una realidad, aunque se han hecho muchos avances en igualdad todavía queda mucho camino por recorrer y queda mucho margen de mejora».
Aunque uno de los argumentos que más se esgrimen en la celebración del Día Internacional de la Mujer es el de la discriminación con los hombres, ésta es una experiencia que ella no ha sufrido. «En mi caso, el ser mujer no me ha condicionado en mi vida laboral de trabajo y me he esforzado muchísimo como cualquier persona para conseguir desarrollarme como profesional, así como personalmente he tenido la suerte de no enfrentarme a ninguna situación de discriminación por el hecho de ser mujer, aunque eso no quiere decir que no sea la realidad de otras mujeres», apunta. Isabel Albás considera que ninguna mujer se tendría que ver forzada a elegir entre el trabajo y la familia, aunque entiende que «si a alguna mujer se viera en esa situación mi opinión es que es muy injusto tener que elegir, eso es como preguntar a quien quieres más a papá o a mamá».
Ciudadanos Córdoba celebró el pasado lunes un acto con motivo del Día Internacional de la Mujer en el que, bajo el lema Rompiendo barreras. Camino hacia la igualdad el diputado Marcial Gómez y la propia Albás intervinieron en un acto en el que además hubo una mesa redonda que reunió a cuatro mujeres de cuatro profesiones distintas. Sobre esta fecha, la parlamentaria andaluza entiende que «el 8 de Marzo es el día en el que se reivindica el día de la mujer, pero yo creo tendríamos que trabajar por la igualdad real los 365 días del año, ya que las mujeres somos personas y como tal tenemos los mismos derechos que los hombres, porque no se consigue la igualdad a base de titulares, sino con hechos y políticas concretas». Sobre este aspecto añade que Ciudadanos ha llevado a las diferentes instituciones políticas de pro de la igualdad real, ya que «hay que trabajar con hechos como la ley naranja de medidas urgentes para los autónomos, en la que se incluyen medidas para equiparar las condiciones de la mujer autónoma a la de la trabajadora por cuenta ajena, así como las ayudas a las familias con niños de cero a tres años para poder llevarlos a las guarderías y el aumento del permiso de paternidad, porque es fundamental que todos trabajemos en la misma dirección hombres y mujeres, somos todos iguales y todos tenemos los mismos derechos y obligaciones».
Esta parlamentaria andaluza se muestra una firme de la igualdad de mérito a la hora de acceder a un alto cargo, porque «cuando nos referimos a mujeres en puestos de responsabilidad es inadmisible que ella tenga que demostrar su valía mucho más que un hombre, y la sociedad debe valorar a las personas, su capacidad y su mérito independientemente de su género». En el plano político está el caso de Inés Arrimadas, que ha encabezado la candidatura más votada en las últimas elecciones catalanas. Para Albás, su caso «demuestra que con capacidad, cualificación y esfuerzo se puede llegar a donde se proponga, porque Inés es una trabajadora incansable que tiene en su cabeza y en su corazón un proyecto para Cataluña, que ha sabido transmitirlo con sencillez y mucho sentido común a los catalanes y por eso un millón de personas han confiando en ella» y concluye que «Inés está haciendo un trabajo inmejorable en Cataluña y eso es por capacidad y preparación y no por ser mujer».
Pero tanto durante la campaña electoral como después de celebradas las elecciones, Arrimadas ha sido víctima de una campaña de insultos y agresiones que, según su compañera de formación «si hubiera sido hombre no los hubiera recibido, porque muchos de ellos han sido sexistas, lo que demuestra que tenemos mucho que trabajar por la igualdad real entre hombres y mujeres». Por último, Isabel Albás considera que «la igualdad no es tema de lenguaje igualitario o forma de vestir, la igualdad es educación y valores, por eso tenemos que preocuparnos muchos de educación a nuestros hijos en igualdad y acabar con determinados roles que durante muchos años se han impuesto en nuestra sociedad».