La Confluencia los partidos de la izquierda cordobesa, la misma que la coordinadora local de Izquierda Unida ponía como frontera al PSOE (no incluido, claro está), es un melón sin catar. De hecho, hasta este domingo no se sabrá si Ganemos Córdoba se sumará a ella. Algo que en la formación de Blázquez, Aguilera y compañía se han encargado de guardar como el mayor de los secretos.
Si Ganemos da el ok en su asamblea de este domingo en el barrio de la Fuensanta, el siguiente paso será el de conocer el nombre del candidato. Por lo que aguarda una dura contienda política antes de conocer, quién será el elegido o la elegida para representar a la izquierda radical cordobesa.
¿Los mejor colocados?
A bote pronto, la terna de la que debería salir el candidato la formarían el primer teniente de alcalde, Pedro García (IU); el portavoz de Ganemos en el Ayuntamiento, Rafael Blázquez; y el coordinador de Podemos en la ciudad de Córdoba, Jorge Hidalgo. A priori, ese debería ser el orden de primacía, pero la realidad es que puede que ninguno de los tres encabece la lista en las municipales.
Pedro García
El líder de Izquierda Unida ha hecho valer, durante los últimos tres años y medio, su acumulación de cargos (número 2 del ejecutivo municipal, presidente de la GMU, Sadeco e Imtur), para tener más visibilidad que todos sus contrincantes juntos. Su discurso comenzó fuerte, se suavizó después y vuelve a ser más duro que nunca, cuando se acerca la hora de elegir. Su gran debe, además de la incontinencia verbal, es que ha entrado en conflicto con numerosos colectivos de la ciudad.
Rafael Blázquez
Ganemos acudió a las elecciones de 2015 con la vitola de favoritos de la izquierda. En votos ganaron en la parte más radical de la balanza. En concejales empataron con IU y perdieron el sorpasso al PSOE. De aquella marea verde con fondo morado, han quedado los restos de una ola que ha perdido fuerza. Es más, el papel de bisagra del Partido Socialista e Izquierda Unida en el gobierno ha sido más una rémora que una virtud. Baste comprobar cómo se han acabado plegando a los postulados de sus socios, pese a sus continuas quejas. Como ejemplo los presupuestos municipales.
Jorge Hidalgo
En líneas generales, los representantes cordobeses de la formación de Pablo Iglesias apenas son conocidos en la ciudad, más allá de sus círculos de confianza o zonas de confort. Si bien, a diferencia de sus dos camaradas, Hidalgo cuenta con la ventaja de que su formación es la más poderosa de las tres. Más allá de la capital, Podemos casi hace un favor a Izquierda Unida dejándoles participar en la Confluencia y, en Córdoba, Ganemos es su marca blanca, por más que desde la agrupación electores se hayan querido desvincular.