Los independientes quieren ganar peso en la confluencia de izquierdas que pretende concurrir a las elecciones municipales del próximo 26 de mayo. El chispazo fue un manifiesto firmado por personas no vinculadas orgánicamente a las formaciones políticas y a partir de ahí se puso en marcha la maquinaria de reuniones, consensos y asambleas que llegó el pasado 10 de febrero a un encuentro en el que no se cerró nada.
Cuando ese manifiesto vio la luz respondió Ganemos que aceptaba el reto, pero que la confluencia no debía ser conducida por los partidos políticos, en este caso Podemos, IU y Equo, sino que debían ser los cordobeses, a título individual, quienes se sumasen a esta iniciativa. Hoy, Ganemos ha servido de enlace para la comparecencia de una decena de personas que han hecho un llamamiento para que la asamblea de este sábado en el Centro Cívico Fuensanta acuda el mayor número de personas posible, haciendo un especial llamamiento a «la gente joven», como ha señalado la portavoz de este colectivo, Amelia Sanchís.
El objetivo no es otro que ganar peso en esta asamblea, para que la misma «sea soberana para ver de qué hay que hablar y que no se pongan líneas rojas», en una apelación, repetida varias veces a lo largo de su intervención, en defensa de «la democracia participativa y no representativa».
Esta estrategia cuadra con la defendida por Ganemos desde que en enero se conoció el manifiesto, firmado entre otros por Julio Anguita, sobre el que dijo que la confluencia se tenía que construir con “diálogo horizontal y desde abajo y no ser una mera suma de siglas teledirigida desde cúpulas políticas».