La concejal del Grupo Municipal Socialista Isabel Baena ha criticado el inicio del procedimiento para contratar la gestión y la emisión de las entradas de los museos y los espacios monumentales gestionados por el Consistorio. Ha explicado que el contrato aglutina la venta integral; esto es, telemática y presencial, por lo que incluye gastos de personal entre los costes directos.

“Nuestro grupo siempre estará a favor de que se modernicen los sistemas informáticos y, por ende, el servicio al ciudadano que a su vez favorezca el acceso a estos monumentos. Igualmente siempre rechazará que la necesidad de instalar un nuevo software se use para esconder la contratación de personal en espacios municipales”, ha subrayado Baena. 

En este sentido, ha insistido en que “la carencia de personal no puede ser la excusa para vender el Ayuntamiento poco a poco, sino que debe ser un acicate para urgir a una política ágil de recursos humanos que permita incorporar personal desde el Ayuntamiento para dar respuesta a estas necesidades”.

Venta de entradas en todos los museos

El expediente afecta al Alcázar de los Reyes Cristianos, al Museo Taurino, al Museo Julio Romero de Torres y los baños del Alcázar. El presupuesto, según la memoria justificativa, asciende a un montante de casi 270.000 euros para un periodo de dos años, prorrogables a otros dos.

La justificación del contrato es la falta de medios personales y materiales suficientes para la gestión y emisión de entradas en estos recintos con un sistema integral. “Hasta donde sabemos no se han analizado otras alternativas y se nos ocurren varias a esta externalización. Nos hubiera gustado poder aportar otras soluciones en materia de personal”, ha lamentado Baena.

Y es que aunque la memoria de este procedimiento de venta de entradas data de febrero y el alcalde firmó esta decisión hace ya dos semanas “no se ha explicado en ningún momento este proceso al resto de los miembros de la corporación”, ha informado la concejal del PSOE.

Baena ha recordado que esta nueva privatización se une a las ya materializadas del servicio de recaudación, de parte de la limpieza de los contenedores y el intento que se abortó para externalizar los conciertos internacionales del Festival de la Guitarra.