El Sindicato de Enfermería, SATSE, ha denunciado que «más de 105.000 enfermeros de siete comunidades autónomas están siendo discriminados respecto a sus compañeros del resto del país al seguir sin tener la jornada laboral de 35 horas semanales transcurridos ya más de tres años desde que el Gobierno posibilitase recuperar este derecho laboral perdido en 2012″.
SATSE subraya que «los enfermeros y fisioterapeutas que dependen de los servicios de salud de Aragón, Baleares, Castilla y León, Cataluña, Galicia, Madrid y Murcia aún sufren el recorte impuesto hace cerca ya de diez años con motivo de la crisis económica y siguen trabajando 37,5 horas a la semana».
«Además de no haber recuperado un derecho laboral que permite el Gobierno central desde 2018, se produce una clara situación de discriminación con respecto a sus compañeros que prestan sus servicios en Andalucía, Asturias, Canarias, Cantabria Castilla-La Mancha, Comunidad Valenciana, Euskadi, Extremadura, La Rioja y Navarra donde hace ya tiempo se recuperó la jornada de 35 horas a la semana», señala SATSE.
El Sindicato de Enfermería recalca que, «una vez superado lo peor de la pandemia del Covid-19, ha llegado el momento para que las distintas administraciones sanitarias autonómicas cumplan sus compromisos de mejorar las condiciones laborales y profesionales de sus plantillas de enfermeros y fisioterapeutas, y posibiliten que haya la misma jornada laboral en el conjunto del Estado».
“Si algo ha quedado totalmente demostrado durante la pandemia es la necesidad de reforzar las plantillas de enfermeras, enfermeros y fisioterapeutas y la vuelta a la jornada laboral de 35 horas semanales conllevaría la generación de unos puestos de trabajo que son más necesarios que nunca”, apuntan desde la organización sindical.
En este sentido, el Sindicato de Enfermería recuerda que «todos los servicios de salud sufren importantes listas de espera que han aumentado considerablemente durante la crisis sanitaria y que deben reducirse a través de una apuesta prioritaria por contar con los profesionales necesarios en todos los hospitales y centros de salud de cada comunidad autónoma».
Asimismo, SATSE reitera que «es totalmente injustificable que hayan transcurrido ya tres años desde que los distintos gobiernos autonómicos se comprometieron a recuperar este importante derecho laboral sustraído durante los años de la crisis y todavía haya siete comunidades autónomas que no han dado respuesta a una justa y lógica demanda de sus profesionales. Les están imponiendo una inaceptable e incompresible discriminación laboral que representa un clara falta de respeto a su responsabilidad y dignidad profesional”, añade.
Además de la vuelta a la jornada laboral de 35 horas semanales, SATSE «sigue trabajando y presionando a las diferentes administraciones sanitarias, a través de las mesas y órganos de negociación, para que otros derechos y avances laborales y profesionales se desarrollen de manera homogénea en el conjunto del Estado, caso, por ejemplo, del conocido como ‘solape de jornada’ o la carrera profesional».
“No podemos permitir que se perpetúen en el tiempo evidentes y perjudiciales discriminaciones que llevan a tener a enfermeros, enfermeras, fisioterapeutas u otros profesionales sanitarios de ‘primera o segunda categoría’ por el único motivo de trabajar para el servicio de salud de una comunidad autónoma o de otra”, concluye.