El Sindicato de Enfermería y Fisioterapia SATSE, mayoritario en la Sanidad Pública Andaluza, califica estos recortes como un atraco a los más de 5000 Profesionales del SAS que trabajan en el Reina Sofía. Resulta paradójico que, mientras que el conjunto de la sociedad reconoce la titánica labor del conjunto de Enfermeras y Fisioterapeutas frente a la Pandemia como heroica, la Administración Sanitaria los “premia” con recortes económicos que se traducen en menos contratos y menos retribuciones.
De hecho, según afirma SATSE, los recortes comenzaron hace un año cuando el SAS dejó a deber a todos sus Profesionales un 24% de la Productividad del año 2019 a pesar de las continuas promesas de pago hechas por sus dirigentes, incumplidas sistemáticamente una y otra vez.
El siguiente despropósito ha sido la no renovación de algo más de 200 contratos entre Enfermeros y Fisioterapeutas a finales de Octubre en el Hospital Reina Sofía, lo cual ha provocado una disminución considerable de estos Profesionales en este Centro Sanitario. Como consecuencia de ello se ha visto incrementada la sobrecarga asistencial que, de por sí, ya padecían estos trabajadores.
El siguiente episodio de esta lamentable gestión se ha producido pocos días después de mandar al desempleo a muchos sanitarios y ha consistido en, con total premeditación, meter la tijera en la Productividad correspondiente al año 2020. En el primer semestre de este año se abonó un 30% de dicho concepto, quedando pendiente el 70% restante para su abono a final de Octubre. Sin embargo, según se ha podido comprobar, lo que se ha abonado en la última nómina es una cantidad muy inferior a lo previsto, lo cual ha generado gran malestar e indignación entre los trabajadores. SATSE calcula que cada Enfermero y Fisioterapeuta ha sufrido un recorte de 1000 euros de media en ese concepto perteneciente al C.R.P 2020, ascendiendo el montante, solo en esas Categorías, a cerca de 1 millón de euros.
Según han comprobado muchos Profesionales, las notas asignadas a cada uno en función de la consecución de los objetivos han sido bajas en general, lo cual ha supuesto una gran disminución de esa retribución. Sospecha SATSE que, además, el SAS ha aplicado un factor corrector negativo a los objetivos alcanzados por cada Centro Sanitario, por lo que la pérdida económica de cada Profesional se ha visto incrementada notablemente. Cabe recordar en este momento que los objetivos marcados para Profesionales y Centros han sido totalmente inalcanzables ya que, como todo el mundo sabe, el COVID-19 ha impedido que los Centros Sanitarios funcionasen con normalidad, ya que se priorizaba salvar las vidas de los pacientes que desbordaban los Hospitales saturando UCI’s, Urgencias, Unidades de Hospitalización y hasta quirófanos que se veían obligados a suspender las operaciones para ser reconvertidos en Unidades de Críticos improvisadas.
Sostiene SATSE que es indignante el atropello económico que el SAS ha asestado a todos sus Profesionales tras los casi dos años que llevan dando lo mejor de sí mismos en la lucha contra el COVID-19, muchas veces sin los medios de protección adecuados o con un gran déficit de personal como sucedió en los primeros meses de la Pandemia. Y más indignante es que ahora el SAS, con estos recortes, pretenda financiar todos los gastos extras en material y Personal que la Pandemia ha supuesto.
Finaliza SATSE exigiendo al SAS que demuestre el reconocimiento hacia la Enfermería, la Fisioterapia y el conjunto de trabajadores Sanitarios con hechos y no con vacías palabras, abonando todo lo que les debe de años anteriores, la totalidad de la Productividad del 2020 y volviendo a contratar a los Profesionales despedidos en el Reina Sofía.