La asociación NEOS, que encabezan los expolíticos Jaime Mayor Oreja y María San Gil, se presentó esta semana en Córdoba en un acto del ciclo ‘España en concordia’ para dar a conocer las razones que han inspirado su creación que, en palabras del primero, de forma muy sintética, consiste en que «vivimos un momento ciertamente difícil y nos hemos desarmado moralmente».
La situación de España, con un gobierno socialcomunista dedicado a la ingeniería social, no es muy distinta de la de buena parte de Europa, pero sí contrasta con la posición de Polonia que, tras la invasión de Ucrania, «está dando ejemplo a toda Europa de lo que es tener fe, que es ayudar a los demás».
Mayor Oreja y San Gil fueron de lo general a lo concreto en el transcurso del acto, que estuvo dirigido por el redactor jefe de La Voz de Córdoba, Rafael González. De la pérdida de las raíces cristianas de Europa a la posibilidad de que Bildu gobierne en el País Vasco en 2024, entre otras muchas cuestiones. Y para esto nace NEOS.
Los fundamentos de NEOS
San Gil explicó que NEOS se sitúa al margen del espectro político, porque «los políticos no siempre dan respuesta a lo que nosotros queremos». Para eso es necesaria esta plataforma que agrupa a todos los colectivos nacidos en los últimos años para defender cuestiones tan básicas como la vida, la verdad, la libertad, la dignidad de la persona, la monarquía, España como nación y la defensa frente a las amenazas globales. «Si NEOS es una sola voz ya tendrán los partidos políticos cuidado de hacernos caso», apuntó la expresidenta del PP vasco.
NEOS tiene un germen en la Fundación Valores y Sociedad, que preside el propio Mayor Oreja, en la Asociación Católica de Propagandistas y la Fundación Villacisneros, de la que la San Gil es vicepresidenta. Se organizó un ciclo de conferencias y a partir de ahí, como explicó el exministro del Interior, «nos dimos cuenta de que había una gran orfandad cívica y social», y así surgió «este proyecto común y compartido» y abierto a todo el que defienda los principios de NEOS.
El papel que se ha marcado esta asociación es «poner a disposición de la sociedad unos argumentos» para la defensa de los siete puntos que inspiran el trabajo de NEOS. Además, como explicó San Gil, también tiene el objetivo de «ser un instrumento muy útil para reivindicar aquello en lo que creemos y de ser un pepito grillo de determinados partidos cuando se ponen de perfil ante cuestiones que para nosotros son sensibles».
La pérdida de la fe
¿Cómo se ha llegado a esta situación? Mayor Oreja respondió a esta pregunta con claridad: «La causa de la crisis en el mundo occidental ha sido la pérdida de la fe». Este orillamiento de la fe cristiana ha hecho que se abandone la práctica de decir la verdad, algo que en su opinión es «exhausto, agotador, te deja en soledad porque la gente prefiere la mentira».
En el caso de España, las dos últimas décadas han sido fundamentales en este cambio cuya autoría atribuyó Mayor Oreja a la banda terrorista ETA y al expresidente del Gobierno José Luis Rodríguez Zapatero. Ambas partes pusieron en marcha «un proceso de ingeniería social» que se fundamentaba en que «uno dejaba de matar y otro hacía una transformación profunda de España».
María San Gil ahondó en este hecho y aportó el dato de que en «los años de Gobierno de Mariano Rajoy no ilegalizaron a Bildu ni a todas sus marcas, el Pacto Antiterrorista se guardó en un cajón y nos hemos olvidado de las víctimas del terrorismo».
El papel del terrorismo
El terrorismo, precisamente, también jugó un papel destacado en la transición, porque «el estado de las autonomías es fruto de una prisa y eso se aceleró por culpa del terrorismo», como señaló en el acto celebrado en el Centro Cultural José Luis García Palacio de la Fundación Caja Rural del Sur.
El futuro, según estos miembros de NEOS no pinta nada bien. San Gil dejó caer el dato de que «la amenaza de la Agenda 2030 está ahí» y Mayor Oreja se sinceró: «No soy pesimista, estoy pesimista, que no es lo mismo; soy optimista, pero estar hoy optimista es mentir».