
Todos los grupos de la oposición, Vox incluido, han cargado con dureza contra los cuatro expedientes en los que se reparte el destino de los 26 millones restantes de los remanentes municipales del pasado año después de que un primer paquete de cuatro millones se aprobara en el Pleno ordinario del pasado jueves y nueve millones se destinen a la amortización de deuda.
Los cuatro expedientes han sido aprobados con mayoría simple; es decir, con los votos exclusivos de PP y Ciudadanos, mientras que Vox se ha abstenido en dos de ellos y ha votado en contra en los otros dos, y el resto de grupos, salvo los socialistas que se han opuesto a todo, han variado el voto según el punto del orden del día.
El argumento más repetido es el de que se aprueba un gasto una vez ya cruzado el ecuador del año, en las puertas del periodo vacaciones y con escasas probabilidades de que se ejecute en su totalidad. La portavoz de Vox, Paula Badanelli, ha afirmado que «los remanentes existe porque el gobierno municipal es incapaz de gastar», y su homólogo del PSOE, José Antonio Romero, ha remarcado el dato de que la ejecución presupuestaria de pasado año fue del 57 por ciento, «una de las más bajas en la historia del Ayuntamiento«.
Otra razón esgrimida por la oposición para nos respaldar de pleno estos expedientes de remanentes es sobre la elaboración de los mismos. La portavoz de Podemos, Cristina Pedrajas, ha criticado que no hay unidad en ellos, sino que se han confeccionado «de modo aleatorio, que puede ser intencionado».
En IU, Alba Doblas ha explicado que el mecanismo ha consistido en «meter cositas en medio de propuestas infames para que se las votemos, pero no lo vamos a hacer» y esto, para Badanelli es actuar «de forma trilera, torticera», ya que los expedientes se cerraban conforme se alcanzaban acuerdos con la oposición.
El responsable de estos expedientes de remanentes, Salvador Fuentes, se ha defendido al señalar que esto se ha negociado tras los comicios andaluces, por lo que les ha dicho que «están hablando más por los resultados de las elecciones autonómicas que por el sentido común».
El delegado de Hacienda ha defendido la gestión del gobierno municipal y ha aportado el dato de que de los 25,7 millones del pasado año se gastaron 18,4 millones, por lo que «merecíamos una oportunidad».