Desde su renuncia al cargo de teniente de alcalde de Cultura por razones de salud, Juan Miguel Moreno Calderón no había tenido comparecencia pública alguna hasta que esta mañana ha aparecido por sorpresa en la rueda de prensa de presentación del XVIII Festival de Piano Rafael Orozco. Su nombre no figuraba en la convocatoria, por lo que ha sorprendido a los periodistas, que lo han recibido con aplausos en la sala de prensa de Orive.

Lo ha hecho en su condición de representante de la Asociación Pianística Rafael Orozco y ha agradecido las palabras «cálidas y cariñosas» de su sucesora en el cargo, Blanca Torrent, quien lea agradecido «la organización del festival y otras muchas cosas más». 

Moreno Calderón ha explicado que este festival, que se desarrollará del 8 al 29 de noviembre, nació en 2002 como un acto más del centenario del Conservatorio cordobés. En aquel momento, la delegada de Cultura, Angelina Costa, y el jefe de Área, Juan Carlos Limia, le ofrecieron su participación y él, que en aquel momento era director del Conservatorio, propuso un festival de Piano y que llevara el nombre de Rafael Orozco, porque «los intérpretes, cuando mueren, no tienen composiciones para que se recuerde su nombre». De ser un acto excepcional pasó a ser una cita anual que ya cumple 18 ediciones.

Ha recordado que desde que fuera inaugurado por Javier Perianes, han pasado por el mismo las primeras figuras del piano en España y que «no necesita ponerse la etiqueta de internacional porque realmente lo es desde hace muchos años», y ha logrado «fidelizar un público que cada vez es más exigente».

En esta ocasión se desarrollarán en el Conservatorio Superior de Música Rafael Orozco, salvo la actuación de Jorge Luis Prats, que lo hará en el Gran Teatro acompañado de la Orquesta de Córdoba. Por el mismo pasarán Alba Ventura, Luis Fernando Pérez, Anna Dmytrenko, Goran Filipec, Dmytro Choni, Leonel Morales, Tamar Beraia y el cordobés Angel Andrés Muñoz.

La relevancia de este festival cordobés hace que «ya hay representantes que están mandando sus propuestas para el año que viene», por lo que su proyección más allá de las fronteras locales es más que considerable. Además, todo ello se logra con un presupuesto reducido, 40.000 euros, si se compara con otras citas de la programación cultural.