Comenzó la temporada perdiendo en Cartagena, para luego ganar de forma consecutiva a Palma y a Burela (al que goleó a domicilio por 1-4). Así ha sido el arranque del Córdoba Patrimonio de la Humanidad en su tercera temporada en la máxima categoría del fútbol sala nacional.
Pero, en este esperanzador inicio, hubo un punto de inflexión y fue en el segundo partido ante Palma en Vistalegre. Después de aquella victoria por 4-2 frente a uno de los mejores equipos de Primera División, el entrenador del Córdoba Patrimonio, Josan González, desvelaba lo que dijo a sus pupilos en el vestuario durante el tiempo de descanso.
“Si queremos soñar en grande tenemos que hacerlo en la pista”, comenzaba el preparador pontanés. Esto para agregar que dijo a sus jugadores que todos “son un ejemplo de vida”, ya que, “cada uno, para llegar aquí ha tenido mucho trabajo, han tenido que superarse mucho y lo que quiero es que cuando la gente venga se sienta identificada con ellos”. Y ponía como ejemplo que, tras aquel partido, los aficionados “cuando vayan a los bares de Córdoba a comer con sus familias estén hablando del equipo, de lo que luchan”.