“Venimos a jugar un partido en el que al vestuario no hemos podido entrar, que estamos de pie prácticamente desde que llegamos o intentando buscar sombra, y eso al final hace que no salgas con la concentración correcta”. En estos términos se manifestaba el entrenador del Córdoba Club de Fútbol (CCF), Germán Crespo, tras el partido contra el Almería.

No era una excusa, puesto que el conjunto blanquiverde venció al cuadro indálico, pero el técnico del Córdoba achacó, en parte a eso, que su equipo no entrara todo lo concentrado que debiera al segundo choque de pretemporada. 

Sea como fuere, la realidad es que las dos primeras pruebas serias de la pretemporada han dejado la misma sensación con la que concluyó la anterior campaña, el Córdoba está imparable. Bien es cierto que los equipos están echando a rodar, pero tampoco lo es menos que el Almería es un recién ascendido a Primera y el Granada un recién descendido a Segunda.

El 1-0 ante el cuadro nazarí y el 1-2 ante el conjunto almeriense, de momento, abren una inmejorable perspectiva ante la temporada que se avecina, en la que el Córdoba deberá luchar por estar en la pelea por el ascenso en la Primera RFEF. Hasta la fecha, los de Germán Crespo hacen lo mejor que han sabido durante los últimos meses, ganar.