Al Córdoba Patrimonio de la Humanidad le gusta ganar fuera. De hecho, sus dos únicas victorias en lo que va de temporada han sido lejos de Vistalegre, primero en Navarra contra el Xota y, este sábado, en tierras manchegas ante el Manzanares Quesos el Hidalgo. 

Los méritos del Patrimonio fueron muchos (cuando se tienen también hay que decirlos) y hoy demostraron capacidad de sufrimiento, determinación, calidad y ganas de salir del pozo. Así, salieron mejor a la pista, y se repusieron a la derrota momentánea (1-0) del Primer tiempo, para hacer tres goles en la segunda mitad y eso, pese a que con el 1-2 le empataron, además de infligir a su oponente la primera derrota de la temporada. Muestra de que el equipo de Josan González comienza a carburar.

El primer tiempo, muy disputado por ambos conjuntos, tuvo sin embargo un leve matiz blanquiverde hasta el ecuador del mismo. Así, Miguelín en el minuto cuatro e Ismael a los seis de juego pudieron poner en ventaja a un Patrimonio, que tuvo en Fabio a su gran activo en el ocho, cuando se sacó una parada providencial. Dos minutos más tarde (’10) vilvierona tenerla los de Josan González, pero hubo que esperar al ’12 para ver el primer tanto del encuentro, que fue para el Manzanares, por medio de Fran Cortés. Apenas con unas pocas ocasiones para ambas escuadras se llegó al descanso con el 1-0 para los manchegos.

El segundo acto comenzó con una ocasión de Saura y con el empate de Viana en el minuto 24. El encuentro siguió igualado en todo, pero esta vez la balanza se decantó por el lado del Patrimonio, que se adelantó por medio de Saura, tras un saque de falta de Miguelín. Pero la alegría duró poco, ya que a la media hora de partido el Manzanares conseguía establecer el 2-2. 

Gran final del Patrimonio

Los blanquiverdes, lejos de venirse abajo, siguieron manteniendo el pulso al choque y eso pese a la presión de la afición local, que convirtió el Antonio Caba en un hervidero. Primero fue una doble ocasión de Jesulito en el ’33 quien dio el aviso, luego Viana volvió a ser el gran protagonista, poniendo el 2-3 a cinco minutos del final. El Manzanares jugó de cinco los últimos minutos del encuentro, buscando igualar a la desesperada. El Patrimonio defendía con todo y Fabio fue uno de sus jugadores más destacados, el meta estaba siendo decisivo. 

Tras un reparto de amarillas, el partido acabó con una merecida y sufrida victoria del Patrimonio, que le sirve para tomar un importante balón de oxígeno.