Dos coloretes y a la calle, ¡arranca el Carnaval!


Los pregoneros de la fiesta de febrero en la ciudad, Fernando Abad y Antonio Ramírez, músico y letrista, han inaugurado el verdadero Carnaval, el de los cuplés y estribillos en cualquier esquina

El Carnaval cobra su sentido en la calle para que, por una vez al año, podamos convertirnos en piratas, payasos o bailarinas rusas. Anoche los pregoneros de este año, Fernando Abad y Antonio Ramírez, han recordado a los cordobeses la tradición de febrero repasando su trayectoria, casi tres décadas de comparsas que no son más que «la historia cantada de la ciudad».

Añete y Fernandito, tras el pregón del Carnaval.
Añete y Fernandito, tras el pregón del Carnaval. Foto: LVC

A ellos les unió el señero barrio de El Campo de la Verdad, cuna de grandes autores de la fiesta dada la importancia del flamenco en las peñas tradicionales de la zona que impulsaba a impregnarse del compás a los jóvenes. Fernandito Abad, como se le conoce, se enganchó al «veneno» del Carnaval escuchando un grupo de Pablo Castilla a finales de los ochenta en la verbena de su barrio.
«He tenido la suerte de tener a grandes maestros», ha recordado en su pregón, ya que empezó formando parte de los grupos de Castilla, Antonio Navas, Manuel Pérez de Austria, Antonio Cobos, hasta que en 1991 saca su primera comparsa, Cabeza hueca, de la que se interpretó anoche su presentación.
El Campo de la Verdad
Solo un año después, se cruza en su camino Antonio Ramírez, a quien carnavalmente hablando se le conoce como Añete que lleva «media vida con Fernando» -como el Carly y el Subiela-; «todo se lo debo a él», desde 1992, con la segunda comparsa de adultos que sacó Fernando, Campo de la Verdad, Antonio le ha estado poniendo la letra a las composiciones logrando como resultado «repertorios que cantan de la misma manera que yo hablo», de una manera pausada, intentando contar lo que pasa para que todo el mundo se entere.
Pregón del Carnaval.
Pregón del Carnaval. /Foto: LVC

Han repasado una a una sus agrupaciones, mientras que iban subiendo postulantes ataviados con los diferentes tipos de sus comparsas: La cantera, La niña de mis ojos (en 1998, bastante antes de que lo hiciese Martínez Ares), Guerra de colores, El tío del saco… así hasta La misteriosa, con la que este año han participado en el Concurso de Agrupaciones de Carnaval de Córdoba.
Entre todos sus grupos, este tándem de autores ha logrado alzarse con un primer premio con la comparsa El Mercantil, nombre de una de las primeras cabeceras informativas de la ciudad en el siglo XIX. Y aunque este año no han logrado pasar a la fase final, ojalá que a Fernandito Abad y a Añete le queden al menos otros treinta años de Carnaval para poder disfrutar de las sentidas coplas de sus comparsas.
Tras el pregón, se han entregado los premios a las agrupaciones ganadoras del XXXV concurso de agrupaciones de carnaval de la ciudad y más de una treintena de ellas han recorrido las calles del centro, Gondomar, Tendillas, Cruz Conde y el bulevar Gran Capitán cantando parte de sus repertorios en corrillos donde centenares de cordobeses han reído escuchando coplas de grupo en grupo. Sorprendentemente, se ha podido ver alguna chirigota callejera, las ilegales, que no han pasado por el concurso, pero con no menos gracias que las oficiales cantando cuplés y pasodobles.
Que no falte el disfraz
Lo que anoche se echó en falta es a los cordobeses disfrazados. Entre la multitud que del pregón de las Tendillas fue buscando agrupaciones se distinguían algunos grupos, sobre todo de adolescentes, disfrazados de superhéroes, de piratas y payasos.
Actuación en el bulevar del Gran Capitán.
Actuación en el bulevar del Gran Capitán. Foto: LVC

El presidente de la Asociación Carnavalesca de Córdoba, Antonio Navajas, que ha participado en el concurso con su propia chirigota, ha animado a los cordobeses a que se asistan hoy al pasacalles que tendrá lugar a partir de las 12.00 de la mañana en el Puente Romano para continuar con actuaciones a pie de calle por los alrededores de la Mezquita-Catedral. A esa misma hora, los pequeños de la casa pueden asistir al concurso de disfraces que se celebrará en la carpa del bulevar Gran Capitán.