El Cordobés: "La gente cree que uno es muy duro, pero se llora mucho"


Bertín Osborne reúne a dos de los hijos de Manuel Benítez 'El Cordobés', en su programa 'Mi casa es la tuya'

Abrazo entre Julio Benítez y Manuel Díaz.

El Palacio Portocarrero de Palma del Río ha sido el escenario del que, a buen seguro, será uno de los bombazos televisivos de 2018. Y es que Bertín Osborne ha reunido a dos de los hijos de Manuel Benítez El Cordobés, en su programa en Mediaset, Mi casa es la tuya. Julio Benítez y Manuel Díaz han compartido, junto al presentador jerezano, algunas de sus experiencias y han desvelado cómo iniciaron su relación, tras ser declarado Díaz como hijo del Quinto Califa.
Díaz ha explicado numerosos aspectos de su vida y de su particular lucha. «Me hice torero por venganza», ha afirmado, para matizar que la misma era por reivindicar sus raíces y hacer justicia a su madre. El torero ha recordado las figuras de sus abuelos maternos. «Mi abuela prácticamente me crió», ha evocado. Mientras que de su abuelo ha desvelado que le costó aceptar el embarazo de su madre, pero no ha escondido el cariño que su familiar sentía por él. De hecho, «me llamo Manuel Díaz González como mi abuelo y eso nunca lo voy a cambiar».
Otro de los aspectos sobre los que ha incidido en la entrevista que le ha realizado Osborne ha sido el frustrado encuentro entre padre e hijo. Momento en que Díaz ha detallado cómo quiere que se produzca, mientras que ha narrado como un empleado del padre lo llamó para proponerle otra fórmula, que no aceptó. Y ha confesado el dolor que le produjo la forma en que salió publicado en la prensa. Y ha subrayado que «no puedo obligar a una persona a que me quiera». Si bien, ha explicado cómo su mujer ha sido un puntal, durante todo este tiempo. «La gente cree que uno es muy duro, pero se llora mucho», ha revelado.
Julio Benítez
«Nunca nos habíamos cruzado y era curioso», ha comenzado señalado Benítez. Quien no ha dudado en señalar, sobre el tiempo que ha pasado que «son temas delicados». Sobre el primer encuentro y el parecido de Díaz a su padre ha destacado que «lo que me sorprendió fueron las manos y los andares», que son como los de su padre. Y ha añadido que «estoy encantado», de haberlo conocido. Mientras que «en el poco tiempo que llevo conociéndolo me ha tratado con muchísimo cariño y también su familia, tanto Virginia como los niños». Si bien, Benítez ha manifestado que «me costó más trabajo decidir torear con él, por el tema mediático». Lo que no es óbice para que el hijo de El Córdobés esté «súper contento de haber dado el paso».