Centenares de «gotas doradas de esperanza» en apoyo al cáncer infantil


Menos del 1% de todos los cánceres que se diagnostican en Córdoba afectan a niños, con una tasa de superación del 80%

La marcha organizada por la Asociación Española Contra el Cáncer (AECC) se ha iniciado a las 11:00 en el bulevar Gran Capitán donde se han concentrado los 14 colegios participantes. Seguidos de voluntarios con banderas y chalecos blancos y verdes, así como de sus profesores han recorrido la calle Gondomar, para finalizar en la plaza de las Tendillas.

   

Largas filas de pancartas y manos llenas de «lazos de oro». Así es como han vivido los niños la jornada por el Día Internacional del Cáncer Infantil. Una manifestación con aire festivo, en la que ha primado un espíritu solidario y el color dorado entre los más de mil alumnos concentrados esta mañana en el centro de la ciudad.

La directora gerente del Hospital Universitario Reina Sofía, Valle García, ha declarado que «alrededor de 45 casos de cáncer infantil se diagnostican cada año en Córdoba». Leucemias, linfomas y tumores del sistema nervioso central se encuentra entre los comunes, de los que «más de un 80% y hasta el 90% o 95% en algunos tipos específicos» se superan anualmente. Unas cifras que se mantienen «estables» a lo largo del año y que pueden incluso ser «esperanzadoras», ya que «menos del 1% de todos los cánceres afectan a niños» ha asegurado.

  

En medio del barullo alegre, la presidenta de la Asociación Española contra el Cáncer, María Luisa Cobos, ha aprovechado para agradecer la conmemoración del acto y exigir «más investigación ante los tantísimos tumores que aún están sin estudiar». Ante la falta de prevención en el cáncer infantil, la asociación «está haciendo lo indecible para buscar solución» según ha declarado Cobos, con voz quebrada ante la emoción de los presentes.

El acto ha continuado con una entrega de medallas solidarias a todos los colegios presente y de tres galardones a la mejor pancarta, a los colegios Encinar, Calasancio y Divina Pastora. Tras un desayuno molinero, los niños asistentes  junto a sus profesores, organizadores y autoridades han soltado globos dorados al aire, con el grito de «¡Fuerza para vosotros!» dirigido a todos los niños que padecen esta enfermedad.