La suspensión de la Feria de Nuestra Señora de la Salud no ha afectado al ánimo de los comerciantes de la calle Cruz Conde, ya que las fechas de esta celebración festiva han coincidido en la entrada de Córdoba en la Fase 2 de la denominada desescalada, por lo que la actividad comercial recupera su ritmo normal.
Comercios como Dímelo hilando o Loles cuentan en estos días con una decoración ferial a base de farolillos, mesas y sillas, a lo que se suman las macetas de gitanillas que repartió el Ayuntamiento a comienzos de mayo. En los próximos días tienen previstas otras tiendas sumarse a esta iniciativa, la que no falta una bandera de España con un crespón de luto en recuerdo de las decenas de víctimas que lleva cobradas la pandemia del coronavirus.
Bea Baldasano, de Dímelo hilando, reconoce que esta recreación de la Feria de la Salud quiere también «animar las ventas», así como agradecer «la solidaridad de los cordobeses», ya que en estos días muchos clientes han reconocido que entraban en las tiendas para generar negocio después de tantas semanas de parón.