A primera hora de esta mañana han comenzado los trabajos de desmontaje de la celosía que cubre el arco en el que se abrirá la denominada segunda puerta en el muro norte de la Mezquita-Catedral, recayente al Patio de los Naranjos, para que las procesiones, en su carrera oficial, puedan entrar al templo por una puerta y salir por otra, creando un circuito que agiliza el discurrir de las estaciones penitenciales.

Estos trabajos comienzan después de que el pasado viernes comunicara la Gerencia Municipal de Urbanismo (GMU) la licencia de obras concedida por su consejo rector el pasado 22 de febrero con el único voto en contra de la representación política de Ganemos Córdoba, la marca blanca de Podemos.
Con la retirada de la celosía se culminan dos largos años de trámites en administraciones a todos los niveles, salvando obstáculos de lo más inverosímil, y que finalmente han llegado a buen puerto con el visto bueno de todas las instancias, destacando el de la Unesco, que llegó a afirmar en su informe que el paso de las procesiones por el interior de la Mezquita-Catedral es beneficioso para el monumento declarado Patrimonio de la Humanidad.
A primera hora de la mañana de hoy ha comenzado la retirada de la celosía con la instalación de un andamio desde el que los operarios realizarán la retirada pieza a pieza hasta dejar expedito el vano. La siguiente fase será la instalación de la puerta abatible que permitirá su apertura tanto para las procesiones como para cualquier otro acto que lo requiera. Esta nueva puerta, según proyecto aprobado por la Comisión de Patrimonio de la Consejería de Cultura y por el consejo rector de la Gerencia de Urbanismo, será una reproducción fiel, hasta en su textura final, de la que ahora se retira.