El Mirador del Patio de San Eulogio, en el Palacio Episcopal, ha acogido a parte de la delegación cordobesa de Manos Unidas que se ha sumado a la iniciativa ‘Enciende la llama’ que la  ONG de la Iglesia ha puesto en marcha para que  «la sociedad pueda sumarse de manera activa y demostrar así su apoyo a los países del Sur y a la acción que Manos Unidas apoya en ellos», según informan desde la entidad.

Alrededor de 50 voluntarios se han dado cita en la terraza custodiada por el Triunfo de San Rafael y han encendido sus velas como símbolo de la promesa de un mundo mejor. Pepa Iribarnegaray Aguirrezábal, delegada diocesana de Manos Unidas en Córdoba ha puntualizado que esa luz será encendida en todas las partes del mundo – además de España, países de África y Sudamérica- a cargo de las personas que ha recibido o participado en algunos de los diferentes proyectos que Manos Unidas desarrolla. «Es la luz que ilumina a los que no la tienen, a los que viven en la oscuridad», ha dicho la delegada.

La iniciativa está abierta a todo aquel que quiera participar, y consiste en hacerse una fotografía con la vela encendida y enviarla a través de un aplicativo que ha habilitado la página web de Manos Unidas. No es necesario que la vela tenga el logo de la entidad y sirve cualquiera, de cualquier tamaño. El 12 de noviembre a partir de las 20h, las velas se ubicarán en un mapa interactivo.

El significado del evento va más allá de lo estrictamente solidario y como puntualiza la delegada diocesana, se pide así mismo «rezar una oración, pedir por todas las personas ‘descartadas’, como dice el Papa, y que la luz sirva para ver el dolor de tanta gente».  Iribarnegaray ha añadido que el gesto sirve también como acto de gratitud por los proyectos que se van consiguiendo gracias a Manos Unidas. 

Manos Unidas es la ONG de Desarrollo de la Iglesia católica y de voluntarios que trabajan para apoyar a los pueblos del Sur en su desarrollo y en la sensibilización de la población española.