Demasiada gente enfadada
En la puerta de un bar hay un amago de pelea, al que tampoco puedes estar muy atento, no sea que se escape una torta
Solo fueron dos
La realidad es que solo hubo dos ediles, mientras acostumbramos a ver a otros hasta en lo que se suele denominar “entierros de tercera”
La trampa de la bonificación del bus
De repente, los chóferes se volvieron sostenibles y no pasaban de 20 kilómetros hora
Un emocionante viaje en bus
Los conductores son como el niño del sexto sentido, no ven muertos, pero sí huecos al fondo del bus
La mirada peligrosa
El ejemplo es sangrante con el caso de las denuncias de violencia de género
Premio para Judas
No será como premio a su labor con la PAC, porque no es que no diera para capataz, sino que no daría ni para enciende…
Los siete pecados del cofrade
Mejor no hablar del que muere por un martillo, que, a la postre, no muere, pero mataría en sentido figurado -queremos pensar-
Una ciudad para no vivir (II): Afán de protagonismo
Esto no es Derecho Penal y no hay ni eximentes ni atenuantes, si criticas, palmas
Veraneo de fin de semana
Un “sujétame el cubata” de manual, siempre promulgado por “líderes sociales”, que de lo que menos saben es de trabajar
Inutilidad manifiesta
Repartir agua no es tan “sencillo” como regar con los fondos europeos a todo hijo de vecino con la esperanza de volver a ese PRI,…
Una ciudad para no vivir
Como en casi todo, cuando la fascinación, el asombro y el escalofrío se van, la ilusión, las ganas y la ambición también desaparecen
Montoro no se lo merece
El municipalismo del PSOE es ese, salir pitando para Sevilla en cuanto se pueda
Cualquier excusa es buena para una procesión
La lista llega casi hasta el infinito y, entre tanto, las cofradías y sus dirigentes se afanan en grandes fastos
Poco pasa…
De vuelta se te cruza un ciclista, te sale un patinete de la nada, se te mete otro en el carril sin miramientos, te pitan…
La papelera maldita
Un mundo pretendidamente feliz en el que solo una cosa falla, la papelera de la esquina
El pacto de verdad es el de la ropa
Las dos musas de la campaña han sido Macarena y Teresa. La primera, con la camisa por dentro
Ser diferente: el rarito y el matón
Todos tenemos que ser aparentemente felices, joviales, extrovertidos, empáticos, esbeltos, divertidos, comer chía y quinoa
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