El gobierno municipal se encuentra en plena fase de negociación con los grupos de la oposición para consensuar el destino de los remanentes del pasado año, que ascienden a una cantidad que ronda los 25 millones de euros. En este proceso, el PSOE ha mostrado su rechazo a que el Ayuntamiento reduzca la deuda que mantiene con las entidades bancarias en torno a unos nueve millones de euros, frente a otros años en los que no ha puesto reparo alguno.

La concejal socialista Carmen Campos ha explicado la negativa de su grupo municipal a que el Ayuntamiento sanee su deuda.  Ha señalado que este año su rechazo a la reducción de este compromiso sí «es una línea roja y no estamos dispuestos a pasar por ahí».

La propuesta del PSOE es que la totalidad de los remanentes se destinen a otros fines, porque «queremos que ese dinero que pagan los cordobeses con sus impuestos les revierta en su economía  y no vaya a los bancos».

Además, Campos ha calificado de «incoherencia» que desde el gobierno municipal se destinen unos nueve millones a amortizar deuda y, a la vez, se pida un crédito de 28 millones a las entidades financieras. Este crédito es el que cada año se solicita por la finalidad de financiar las inversiones previstas en el presupuesto municipal.

Por otra parte, esta edil ha señalado que el delegado de Hacienda, Salvador Fuentes, ha aceptado una de las propuestas del PSOE para el destino de los remanentes y es la de incrementar en un 20 por ciento la bonificación de los abonos de transporte en Aucorsa, que se sumaría al 30 por ciento anunciado por el Gobierno de España.