Corría el año 2007 y, el entonces candidato del PSOE a la Alcaldía de Puente Genil, Esteban Morales, se comprometía a crear -si ganaba las elecciones- una Gerencia de Urbanismo en la localidad para ofrecer «un servicio público, ágil y eficaz a los empresarios y ciudadanos”.

Cuatro años más tarde, Morales ganó el bastón de mando del municipio y, efectivamente, creó la prometida Gerencia de Urbanismo, aunque como Área o Delegación. Pero la institución tuvo su reverso y por ella han pasado siete responsables diferentes en 11 años, por lo que la media de permanencia en el cargo apenas llega al año y medio.

La primera en ocupar el puesto fue Ana María Carrillo, que tiene el récord de permanencia, ya que aguantó el primer mandato de su jefe completo, de 2011 a 2015. Si bien esa ya no sería la tónica y Francisco Carrillo: estuvo la mitad que su antecesora en el puesto, de 2015 a 2017.

Ese año tomó las riendas de la Gerencia el propio Morales, que aguantó hasta el final de ese mandato doblando cargos (2017-2019). Después fue Verónica Morillo, quien ostentó la dirección del organismo entre julio 2019 y junio 2020, mientras que Lorenzo Moreno estuvo desde de junio 2020 a julio 2021.

Tras Moreno repitió Morillo, desde julio de 2021, hasta el pasado mes de septiembre de 2022. Tras su renuncia, le ha tocado el turno a Jesús López:, al que solo le queda aguantar hasta mayo del año que viene, cuando llegarán las elecciones y todo es susceptible de cambiar. Entre tanto, Puente Genil sigue actualmente con un PGOU de 1991, que no se ha conseguido actualizar con los gobiernos del PSOE.