Los pregones a varias voces se están prodigando en los últimos años. Reunir en un mismo acto a exaltadores de ocasiones anteriores es la oportunidad que se aprovecha para solemnizar una efemérides, como ocurrió en la capital cordobesa en 2019 con motivo del 75 aniversario de la Agrupación de Cofradías o como ya se hizo en Lucena en el 50 aniversario de la coronación canónica de la Virgen de Araceli.
En el caso de Córdoba, se trataba de la segunda ocasión en que el organismo cofrade recurría a esta fórmula para celebrar un cumpleaños. Ya lo hizo en 1970, dentro de programa de actos elaborado para su 25 aniversario y que la meteorología frustró en parte.
El acto se celebró en el salón de actos del Monte de Piedad y Caja de Ahorros y reunió a algunos de los pregoneros cordobeses, ya que en aquella época era normal hacer tal designación en personalidades políticas, religiosas o periodísticas de fuera de la capital.
En total fueron ocho los pregoneros participantes en este acto, que fue presidido por Juan Jurado, como vicario capitular de la Diócesis, ya que el obispo Manuel Fernández Conde había fallecido unos meses antes. En la presidencia estaba también el alcalde, Antonio Guzmán Reina, pero compartía esta representación con la de pregonero, ya que lo fue en 1966. Junto a él, Miguel Salcedo Hierro, José María Ortiz Juárez, Manuel González Gisbert, Pedro Palop, Miguel Melguizo y Matías Prats, que se encontraba de viaje en Milán y envió un texto que leyó el periodista Rafael López Cansinos. Otro pregonero que no pudo asistir fue el poeta Luis Jiménez Martos, quien remitió un poema inédito que leyó Salcedo Hierro.
El acto del aniversario de la Agrupación de Cofradías lo cerró Guzmán Reina en una intervención en la que recordó que hacía cinco años que había representado al pueblo de Córdoba como padrino en la coronación canónica de Nuestra Señora de los Dolores.
La Agrupación y una salida extraordinaria frustrada
Precisamente, este 25 aniversario de la Agrupación de Cofradías se iba a cerrar el siguiente sábado, 9 de mayo, con una procesión extraordinaria de la Virgen de los Dolores, en el quinto aniversario de su coronación, y que finalmente acabó frustrando la lluvia. Estaba previsto que un generoso cortejo acompañase a esta imagen, formado por las cofradías de gloria y de penitencia, Adoración Nocturna, Antiguos Alumnos Salesianos, Apostolado de la Oración, Congregaciones Marianas de Luises y Estanislaos, órdenes religiosas, curas párrocos, Cabildo de la Catedral, Sargentos Provisionales, Alféreces Provisionales, Consejo Provincial del Movimiento, presidencia militar, presidencia del Ayuntamiento, Junta de Gobierno de la Agrupación de Cofradías, clero, Diputación Provincial y, cerrando, la Banda Municipal de Música.
El recorrido previsto partía de la plaza de Capuchinos y, con la nomenclatura actual, recorrería Torres Cabrera, plaza de Colón, Ronda de los Tejares, Cruz Conde, Tendillas, Claudio Marcelo, María Cristina, Alfonso XIII, Carbonell y Morand, Cardenal Toledo, Ramírez de las Casas-Deza, Torres Cabrera, plaza de las Doblas y Capuchinos. Pero la meteorología se impuso y todo quedó en un deseo en estas bodas de plata de la Agrupación de Cofradías.
