Antonio J. Morales: “Cuando recibí la noticia me sorprendió, no me lo esperaba en absoluto”


El sacerdote diocesano ha sido llamado por el Dicasterio del Clero y Seminarios para prestar sus servicios especializados a la Santa Sede

Prematrimoniales Antonio Jesús Morales./Foto: Rafael A. Ojeda
Antonio Jesús Morales./Foto: Rafael A. Ojeda
Prematrimoniales Antonio Jesús Morales./Foto: Rafael A. Ojeda
Antonio Jesús Morales./Foto: Rafael A. Ojeda

El sacerdote diocesano, Antonio Jesús Morales, prepara en estos días su marcha a Roma tras ser llamado por la Santa Sede a servir en el Dicasterio del Clero y los Seminarios. Un importante ministerio, que el presbítero ha detallado en una entrevista en la web de la diócesis de Córdoba.

Morales ha desvelado cómo recibió la noticia, señalando que “fue a través de nuestro obispo, D. Demetrio. Me comunicó que habían solicitado expresamente que prestara este servicio a la Santa Sede”. En este sentido, el sacerdote ha confesado que, “cuando recibí la noticia me sorprendió, no me lo esperaba en absoluto”. Si bien, “después de un tiempo de discernimiento y con su ayuda entendí que debía estar disponible a servir a la Iglesia donde hiciera falta”.

Sobre su labor, Morales ha reflexionado que “pienso que mi trabajo tendrá que ver con las competencias atribuidas al Dicasterio del Clero. La mayor parte de ellas vinculadas con la vida de los presbíteros y diáconos. De tal forma que este organismo promueve iniciativas para su santidad y se ocupa de todo aquello que guarda relación con el ejercicio del ministerio pastoral”. 

Asimismo, el presbítero ha explicado que “por otro lado, presta especial atención a los seminarios, velando sobre la formación humana, cristiana y sacerdotal de quienes se sienten llamados por Dios a desempeñar este último servicio dentro de la Iglesia. Finalmente tiene facultades en algunas materias administrativas y dispensas”.

Sobre la diócesis que deja, Morales ha asegurado que “seguiré unido a la diócesis de Córdoba aunque por un periodo de tiempo, cinco años, prestaré servicio a la Santa Sede. Para mí supone un cambio significativo porque tengo que dejar la parroquia de Nuestra Señora de la Fuensanta y otros servicios que venía desempeñando en la diócesis de Córdoba como vicario judicial, vicecanciller, profesor del Seminario Mayor San Pelagio, capellán del Córdoba CF… Estaba en un momento estable en todos los sentidos. Quizás por este motivo me venga bien. Tenemos que saber dejarnos llevar por Dios”.