Diez años del doctorado de San Juan de Ávila


El obispo de Córdoba recuerda la efeméride y lo que ha supuesto la figura del doctor de la Iglesia para el clero dicocesano

«Maestro de Santos» reza en la tumba de San Juan de Ávila (Almodóvar del Campo, Ciudad Real,1500 – Montilla, Córdoba,1569) y así lo recuerda Demetrio Fernández, obispo de Córdoba, en la carta pastoral de esta semana, dedicada al doctor de la Iglesia. 

«Cuanto más se le conoce, más se le valora. La pequeña dificultad de leer sus escritos en un castellano del siglo XVI se supera enseguida cuando uno se familiariza y se encariña con su persona. Ciertamente, constituye un autor espiritual y de la lengua castellana de primera categoría», escribe el prelado que resume esta década poniendo el acento en el «ingente  trabajo realizado en torno a san Juan de Ávila», sobre el que  «ha crecido exponencialmente la devoción, el conocimiento de sus escritos, la fama de santidad y el recurso a su intercesión. La Conferencia Episcopal Española con distintas iniciativas, incluso acudiendo en Plenaria hasta su sepulcro en Montilla, el clero español especialmente recibiendo devotamente el relicario de su corazón en bastantes diócesis de España, los miles de peregrinos –sacerdotes, familias, religiosos, obispos- que acuden a Montilla para venerar su sepulcro». 

En 2015, el obispo de Córdoba hizo entrega al Santo Padre de este cuadro de san Juan de Ávila, obra de la artista montillana María José Ruiz./Foto: Diócesis de Córdoba
En 2015, el obispo de Córdoba hizo entrega al Santo Padre de este cuadro de san Juan de Ávila, obra de la artista montillana María José Ruiz./Foto: Diócesis de Córdoba

Pero el obispo avisa de que aún queda mucho por hacer y que el trabajo «no ha hecho nada más que empezar» y recuerda que la diócesis de Córdoba «es la diócesis de san Juan de Ávila. Aquí está su sepulcro, meta de tantos peregrinos y a Córdoba perteneció como presbítero diocesano, miembro de su presbiterio para siempre. Córdoba, por tanto, tiene una deuda perpetua con san Juan de Ávila, que forma parte del rico patrimonio de santidad de esta diócesis. Se trata de potenciar lo que se viene haciendo y llevar a san Juan de Ávila hasta los confines de la tierra. Iniciativas no faltan, ganas de trabajar, tampoco».

Informa el prelado de que mañana 7 de octubre, el cardenal Rouco preside la Eucaristía desde la Basílica de Montilla, retransmitida por el canal televisivo TRECE para toda España. «Acudimos de nuevo a su intercesión para pedirle especialmente la santidad de los sacerdotes, porque, según el mismo san Juan de Ávila, la deseada renovación de la Iglesia depende sobre todo de la santidad de los sacerdotes y del fervor de los seminarios».

Puede leer la carta de manera íntegra en este enlace.